CIFRAS MACROECONOMICAS Nos mean y ellos dicen que esta lloviendo…

CIFRAS MACROECONOMICAS Nos mean y ellos dicen que esta lloviendo...

FALACIA
¿Perú 8° país mas rico de America Latina?

Nos dicen que Perú es el 8° país mas rico de Latinoamerica (21 países) pero no nos dicen cómo llegan a esa conclusión, y es de esta manera:
Dividen el Producto Bruto Interno del 2012 entre toda la población (30 millones) y eso da un Producto Bruto por cabeza, que en nuestro caso es de $ 11,404 anuales, que viene a ser $ 950 mensuales y que al cambio resultan S/. 2,500 mensuales.
Esto implica que si en tu familia son 5 personas, el ingreso debiera ser S/. 12,500 mensuales, ¿es así? ¿tienes ese ingreso mensual?
De los mas de 6 millones de familias peruanas, ¿cuántas tienen ingresos de ese monto? un mínimo porcentaje ¿no es cierto?
Entonces, ¿de que nos sirve que seamos el 8° país mas rico? igual podríamos ser el 5° o el 2°, si igual eso no se refleja en la mayoría de los peruanos, de nada nos sirve.

LOS 83 MANDAMIENTOS DE ALEJANDRO JODOROWSKY~~

LOS 83 MANDAMIENTOS DE ALEJANDRO JODOROWSKY~~

1.- Cuando te enfermes, en lugar de odiar ese mal, considéralo tu maestro.
2.- No mires con disimulo, mira fijamente.
3.- No olvides a tus muertos, pero dales un sitio limitado, que les impida invadir toda tu vida.
4.- En el lugar donde habites, consagra siempre un sitio a lo sagrado.
5.- Fija tu atención en ti mismo, se consciente en cada instante de lo que piensas, sientes, deseas y haces.
6.- Termina siempre lo que comenzaste.
7.- Haz lo que estás haciendo lo mejor posible.
8.- No te encadenes a nada que a la larga te destruya.
9.- Desarrolla tu generosidad sin testigos.
10.- Trata a cada persona como si fuera un pariente cercano.
11.- Ordena lo que has desordenado.
12.- Aprende a recibir, agradece cada don.
13.- Cesa de autodefinirte.
14.- No mientas ni robes, si lo haces te mientes y robas a ti mismo.
15.- No desees ser imitado.
16.- Haz planes de trabajo y cúmplelos.
17.- No ocupes demasiado espacio.-
18.- No hagas ruidos ni gestos innecesarios.
19.- Si no la tienes imita la fe.
20.- No te dejes impresionar por personalidades fuertes.
21.- No te apropies de nada ni de nadie.
22.- Reparte equitativamente.
23.- No seduzcas.
24.- Come y duerme lo estrictamente necesario.
25.- No hables de tus problemas personales.
26.- No emitas juicios ni criticas cuando desconozcas la mayor parte de los hechos.
27.- No establezcas amistades inútiles.
28.- No sigas modas.
29.- No te vendas.
30.- Respeta los contratos que has firmado.
31.- Sé puntual.
32.- No envidies los bienes o los éxitos del prójimo.
33.- Habla sólo lo necesario.
34.- No pienses en los beneficios que te va a procurar tu obra.
35.- Nunca amenaces.
36.- Realiza tus promesas.
37.- En una discusión ponte en el lugar del otro.
38.- Admite que alguien te supere.
39.- No elimines, sino transforma.
40.- Vence tus miedos, cada uno de ellos es un deseo que se camufla.
41.- Ayuda al otro a ayudarse a sí mismo.
42.- Vence tus antipatías y acércate a las personas que deseas rechazar.
43.- No actúes por reacción a lo que digan bueno o malo de ti.
44.- Transforma tu orgullo en dignidad.
45.- Transforma tu cólera en creatividad.
46.- Transforma tu avaricia en respeto por la belleza.
47.- Transforma tu envidia en admiración por los valores del otro.
48.- Transforma tu odio en caridad.
49.- No te alabes ni te insultes.
50.- Trata lo que no te pertenece como si te perteneciera.
51.- No te quejes.
52.- Desarrolla tu imaginación.
53.- No des órdenes solo por el placer de ser obedecido.
54.- Paga los servicios que te dan.
55.- No hagas propaganda de tus obras o ideas.
56.- No trates de despertar en los otros emociones hacia ti como piedad, admiración, simpatía, complicidad.
57.- No trates de distinguirte por tu apariencia.
58.- Nunca contradigas, solo calla.
59.- No contraigas deudas, adquiere y paga enseguida.
60.- Si ofendes a alguien, pídele perdón.
61.- Si lo has ofendido públicamente, excúsate en público.
62.- Si te das cuenta de que has dicho algo erróneo, no insistas por orgullo en ese error y desiste de inmediato de tus propósitos.
63.- No defiendas tus ideas antiguas sólo por el hecho de que fuiste tú quien las enunció.
64.- No conserves objetos inútiles.
65.- No te adornes con ideas ajenas.
66.- No te fotografíes junto a personajes famosos.
67.- No rindas cuentas a nadie, sé tu propio juez.
68.- Nunca te definas por lo que posees.
69.- Nunca hables de ti sin concederte la posibilidad de cambiar.
70.- Acepta que nada es tuyo.
71.- Cuando te pregunten tu opinión sobre algo o alguien, di solo sus cualidades.
72.- Cuando realices un servicio, no resaltes tus esfuerzos.
73.- Si decides trabajar para los otros, hazlo con placer.
74.- Si dudas entre hacer y no hacer, arriésgate y haz.
75.- No trates de ser todo para tu pareja, admite que busque en otros, lo que tú no puedes darle.
76.- Cuando alguien tenga su público no acudas para contradecirlo y robarle la audiencia.
77.- Vive de un dinero ganado por ti mismo.
78.- No te jactes de aventuras amorosas.
79.- No te vanaglories de tus debilidades.
80.- Nunca visites a alguien sólo por llenar tu tiempo.
81- Obtén para repartir.
82.- Ayuda a tu prójimo sin hacerlo dependiente.
83.- Si estas meditando y llega un diablo, pon ese diablo a meditar…

Javier Heraud desenterrado Por: Cesar Hildebrant

Javier Heraud desenterrado  Por: Cesar Hildebrant

Javier Heraud había nacido seis años antes que yo, así que cuando se murió de treinta balazos disparados por la Guardia Civil yo tenía quince años, estaba en el colegio militar Leoncio Prado y apenas me enteré del ­asunto.

Dos años después, sin embargo, liberado de la ceguera que imponía el colegio, leí a Heraud, quise a Heraud y juré que jamás lo olvidaría.

Más tarde, en “Caretas”, cuando entrevisté a su familia para una nota, percibí que a ellos –sus padres, su hermana– lo que había hecho Heraud les parecía romántico y suicida pero no heroico.

Heraud era mellizo generacional de César Calvo, con quien compartió el premio “El poeta joven del Perú”. Pero mientras a César lo habían secuestrado las palabras y las mujeres –en ese orden–, a Javier lo raptaron las ideas.

Había estudiado en el “Markham”, donde siempre fue uno de los primeros, y había ingresado a la Católica con el primer puesto en Letras. Era buenmozo sin remordimientos, talentoso hasta la precocidad, tierno y buenazo hasta la pared de enfrente.

Con “El viaje” había ganado un premio –en esa época los premios no se daban al toma que te doy– y con “El río”, en 1960, había sorprendido a la crítica. Su poesía tenía mucho de agua limpia que discurre y ­alimenta y a mí lo primero que me impactó fue la limpia de retórica que Heraud había hecho con sus textos. Heraud no quería escribir para impresionar y por eso impresionaba, no aspiraba a ser citado y por eso llamó tanto la atención y no quiso hacer poesía social al uso en los cincuenta y por eso sus poemas tenían la serenidad geográfica de un mundo que él no parecía crear sino descubrir al mismo tiempo que sus lectores. Y por todo eso era casi imposible ­aceptar que el autor de “El río” tenía apenas 18 años. Sólo la poesía francesa había producido precipitaciones tan magníficas.

Todo en Javier fue vértigo impaciente. Fue profesor de inglés y lenguaje a los 17 ­años, apenas salido del colegio, y teacher en el Guadalupe a los 18. Y habiendo ingresado a la Católica se matricula también en San Marcos, donde empezaría sin ganas ­una carrera que sólo podía hacerlo infeliz: la abogacía.

La revolución cubana tronaba en sus oídos, los movimientos anticoloniales cantaban himnos y ganaban guerras, a Jacobo Arbenz lo había depuesto la CIA hacía seis ­años, Juan Bosch estaba a punto de gobernar República Domicana –la CIA lo sacaría del poder siete meses después y luego Lyndon Johnson enviaría 50,000 hombres para respaldar al mequetrefe de Balaguer–, a Jesús Galíndez no le encontraban el cadáver, a Patricio Lumumba ya lo habían empezado a matar entre belgas y norteamericanos, y por todas partes los jóvenes peleaban para que el mundo fuese más de Gramsci que de Mussolini, más de los justos que de los esbirros.

Así que Heraud se fue a la Unión Soviética, invitado; a París, por gracia de unos amigos próximos al socialprogresismo peruano –al que Heraud se había adscrito–; y a Cuba, invitado por el régimen que en ese momento parecía encarnar todas las virtudes y carecer de todos los defectos.

De regreso, Javier no pudo ser el mismo. ¿Le mortificaba la conciencia haber sido un niño de clase media al que nada le faltó? ¿Lo envenenaba esa culpa gratuita que persiguió a Vallejo, cuya tumba parisina había visitado? ¿Lo convencieron los argumentos del Movimiento de Izquierda Revolucionaria, una escisión temprana del APRA decidida a imponer por la fuerza un modelo de sociedad más próximo a los valores de la civilización? ¿Fue engatusado –como dicen los mezquinos y los parásitos de las becas– por astutos camaradas que lo llevaron al suicidio?

Lo que se sabe es que el 15 de mayo de 1963 Javier Heraud está huyendo de un destacamento policial que ha dado con su paradero de guerrillero perdido en medio de la selva. Heraud y Alain Elías, que sobreviviría milagrosamente, van corriente abajo por el río Madre de Dios cuando los Policías los avistan. Los primeros testigos –los que valen– dijeron que, viéndose perdidos, uno de ellos mostró y agitó algo blanco en señal de rendición. Pero ya en 1963 era difícil rendirse en el Perú. Los Policías dispararon sus FAL calibre 7.62. Al cadáver de Heraud le contaron, para el protocolo de la morgue, 29 impactos. “El río” se había ensangrentado para siempre. El poeta caudaloso y el guerrillero estupefacto desaparecieron. Y la consigna de la Caverna peruana –o sea la derecha analfa que lee sus periódicos y sigue siendo analfa– ha sido silenciar a Heraud, prohibir su entrada a los parnasos a los que él jamás hubiese querido entrar.

Ayer, en una silenciosa ceremonia de tono familiar, lo que quedaba de Heraud fue trasladado del cementerio “Los Pioneros”, en Puerto Maldonado, a los Jardines de la Paz, en Lima. Allí están sitos sus huesos, junto a los de su padre y 45 años después de la tragedia.

Si Javier hubiese tenido las prerrogativas de Cristo y hubiese resucitado ayer, en plena ceremonia, podría haber repetido las palabras de otro gran poeta odiado por la Caverna española –o sea la casa matriz de los de ­aquí–: Gabriel Celaya:

“Pensadlo: ser poeta no es decirse a sí mismo.

Es asumir la pena de todo lo existente,

es hablar por los otros, es cargar con el peso

mortal de lo no dicho, contar años por siglos,

ser cualquiera o ser nadie, ser la voz ambulante

que recorre los limbos procurando poblarlos”.

TAL CUAL por César Hildebrandt.

TAL CUAL  por César Hildebrandt.

TAL CUAL
por César Hildebrandt.

La DERECHA PERUANA no tiene patria ni doctrinas ni principios. Solo lo excita el dinero, solo lo entusiasma la codicia, solo le teme a la libertad. Por eso quiere que todo sea inmóvil, fósil, eterno. Es una derecha eclesiástica que aspira a la inmortalidad de sus privilegios.

Y entre ellos está el de decretar qué cosa es buena o qué cosa es mala. […]

Nada que se salga de su monótono libreto es válido.

*Maduro presidente aun después de muerto Chávez?
INACEPTABLE

«Para la derecha peruana el problema no es la democracia (en Venezuela). Es quién corta el jamón.

*Argentina en manos de una mujer insumisa que se enfrentó con éxito al FMI y que pelea con una prensa mafiosa plagada de intereses?
IMPRESENTABLE

*Bolivia reclamando lo que fue arrebatado en una guerra procaz?
DELEZNABLE

*Petroperú queriendo comprar 51% de las acciones de Repsol?
IMPERDONABLE
VELASQUISMO TRASNOCHADO!

*Y cuando el Estado de Obama imprime trillones de billetes para salvar a la banca grande que estafó a los chicos?
EJEMPLAR

*Y cuando Europa ajusta a los ciudadanos después de salvar a los bancos desregulados?
MARAVILLOSO

*Y cuando la empresa estatal Entel-Chile compra a Nextel en Perú?
GRAN NOTICIA!

*Y cuando la estatal noruega Cermaq compra a la privada peruana Copeinca?
GLOBALIZACION!

*Qué divina es la DERECHA PERUANA. Está convencida de que los peruanos somos débiles mentales que se aborregarían antes sus gritos, amenazas, editoriales y columnas escritas por quienes antes firmaban contratos con las Cepris de Fujimori»